Guía básica de aplicación de capacitaciones en tu empresa

Las empresas siempre buscan formas de mejorar su rendimiento y mantenerse por delante de la competencia y la fuerza de trabajo es uno de los pilares fundamentales de una organización y en la que una estrategia adecuada, adaptada y formalizada, puede suponer un aumento de la productividad y sobre todo, de la retención del talento.

Invertir en la formación de los empleados, en empresas como Lakkun, es una forma de lograr este objetivo, por decirlo de otra manera, la formación supone una inversión rentable que se puede utilizar para resolver una amplia gama de problemas empresariales, ya que la formación no solo puede limitarse a aplicarse a niveles operacionales, sino también a estructura y directiva.

Invertir en programas de formación ayudará a tu empresa a mejorar su rendimiento y, además, podrás aprovecharte de la formación bonificada para empresas en Jaén, Málaga, Madrid y otras provincias en función de la localización de tu negocio.

¿Qué es la formación empresarial?

Podemos definir la formación empresarial como el conjunto de estrategias, técnicas, metodologías y acciones que se ponen en marcha dentro de una organización con el objetivo de mejorar las capacidades de los empleados y estos puedan dar un mayor rendimiento al medio y largo plazo.

Tipos de enfoques de formación en la empresa

Existen muchas maneras de implantar la formación empresarial en tu negocio, según el enfoque que quieras darle.

• Enfoque organizativo. Puedes implantar un sistema de formación interno o externo, el primero de ello implicará contar con un departamento de recursos humanos con especialistas en formación, motivación y de metodologías. Por otro lado, existen empresas externas especializadas exclusivamente en la puesta en marcha de sistemas de formación a empresas.
• Enfoque técnico. Las formaciones pueden impartirse de forma presencial, online o modalidad mixta. Durante la pandemia, la modalidad online ha sido el que mayor crecimiento experimentó.
• Enfoque estratégico. El enfoque estratégico determina los niveles o roles de los empleados para aplicar la formación según sus responsabilidades. En este apartado se consideran trabajadores propios de estructura, directivos o empleados administrativos.

Cómo diseñar el programa de formación empresarial óptimo

Antes de iniciar o contratar un sistema de formación y capacitación, debes considerar la situación actual, es decir, establecer métricas y resultados actuales, de esta manera, se podrá comprobar la hipótesis formativa en el medio y largo plazo.

Aparte de la situación actual, es importante identificar los diferentes roles de los empleados para poder así enumerar las diferentes necesidades que se pueden tener en relación con la formación y capacitación. Y, por supuesto, es relevante tener un diálogo abierto con los empleados sobre sus necesidades y objetivos de capacitación.

Esto te ayudará a comprender mejor lo que necesitan aprender y lo que quieren aprender. También te ayudará con sus objetivos de desarrollo personal y de carrera, que a menudo son diferentes a los de la empresa.

Con esto se pretende llevar un seguimiento y control de los resultados para adecuar la metodología adecuada para obtener un mayor resultado.

Recuerda que un programa de capacitación debe estar diseñado para satisfacer las necesidades de la empresa y sus empleados. También debe estar diseñado para cumplir con los objetivos de la empresa, las áreas funcionales, así como adaptada a cada perfil de trabajador para una mayor adquisición de resultados.

Muchas empresas deciden delegar esta tarea a empresas especializadas que realizan el análisis, adaptación, seguimiento y flexibilidad de la formación para adecuarse a las necesidades operativas y directivas.