Enfermedad común: ¿Quién paga y cuánto se cobra?
La baja laboral por enfermedad común es un derecho regulado de los trabajadores que viene contemplado en la Ley General de la Seguridad Social, concretamente, en su artículo 173. Se trata de una circunstancia en la que un empleado padece una dolencia, patología o enfermedad que lo incapacita temporalmente para llevar a cabo las funciones habituales de su puesto de trabajo.
Este derecho se regula en tiempo, cuantía de la prestación o supuestos en los que dicha baja tiene lugar. A continuación, te mostramos qué es exactamente, quién paga esta baja y cuánto puedes cobrar por la baja por enfermedad común.
¿Qué es la baja laboral por enfermedad común y cuánto se cobra por ella?
La baja por enfermedad común es una contingencia que puede tener lugar en cualquier tipo de empresa y momento. Ocurre cuando un trabajador tiene un accidente, dolencia o enfermedad que impide el correcto desempeño de sus funciones cotidianas. Dicha circunstancia trae consigo una suspensión temporal del contrato de trabajo y una serie de prestaciones económicas asociadas.
El subsidio se abona a partir del cuarto día de baja y va cambiando según los plazos estipulados en la ley. Desde el día cuatro al día 20 de baja se percibe el 60% de la base reguladora, mientras que a partir del día 21 y en adelante se percibe el 75% de la base reguladora del trabajador. Sin embargo, estos porcentajes pueden mejorar según el Convenio Colectivo de la empresa donde ser trabaja. Para saber la cuantía exacta en cada caso es imprescindible calcular la nómina por baja por enfermedad común según los parámetros mencionados.
¿Quién paga el subsidio por enfermedad común?
Con el fin de equilibrar las responsabilidades y que la empresa no se haga cargo íntegramente de este pago, se establecen diferentes pagadores según el momento de la baja. Entre los días cuatro y 15 el pago le corresponde a la empresa, a partir del día 16 y en adelante se encargará del pago la propia Seguridad Social.
Requisitos para tener acceso a la prestación
La baja por enfermedad común da derecho a percibir un subsidio a todos los trabajadores siempre que cumplan con los siguientes requisitos:
- El empleado debe estar afiliado a la Seguridad Social, en alta o bien asimilado de alta.
- En el caso de que la baja sea a causa de una enfermedad común, el trabajador debe hacer cotizado los 180 días previos y durante los 5 años anteriores a la aparición de la dolencia.
- Cuando la incapacidad es ocasionada por un accidente que puede ser personal o laboral, no se va a exigir una cotización previa. Esto también ocurre cuando se padece una enfermedad profesional.
La baja laboral y los días de vacaciones
Padecer una enfermedad o tener un accidente que afecte a la capacidad para trabajar no es algo que se pueda planear y puede ocurrir en cualquier momento inesperado. Por lo tanto, en algunos casos va a coincidir con los días de vacaciones del empleado en cuestión.
¿Cómo es el protocolo en esos casos? Pues bien, en este caso el trabajador va a tener derecho a recuperar posteriormente sus días de vacaciones. Recordemos que disfrutar de las vacaciones es un derecho reconocido en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea y no es posible renunciar a él.
¿Cómo se gestiona la baja por enfermedad común?
La baja de la que hablamos debe tener un justificante médico, pues es el profesional sanitario el que determina que las condiciones del trabajador no son óptimas para acudir al puesto de trabajo. Se otorgará un documento duplicado con una copia para el paciente y otra para la empresa, y este se puede recoger en persona o enviando a alguien autorizado para ello.
Será la empresa la encargada de tramitar todo lo necesario para el pago del subsidio a partir del cuarto día de baja. Además, esta prestación se va a mantener a lo largo del tiempo hasta que tenga lugar la reincorporación al ejercicio laboral.
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